Plan Estratégico de Desarrollo Institucional 2017-2020
V. Implementación, seguimiento y evaluación
El esquema de implementación, seguimiento y evaluación del Plan Prospectivo para el Desarrollo Institucional 2017-2030 establece que los planes de cada uno de los periodos rectorales deben mantener congruencia y alineación con la visión 2030 ( figura 26):
Figura 26. Esquema para la instrumentación y seguimiento del pedi 2017-2030.
En este sentido, el presente Plan Estratégico para el Desarrollo Institucional 2017-2020 (Pedi) se alinea a los compromisos establecidos de la prospectiva de largo plazo y la primera etapa de mediano plazo, necesarios para alcanzar la visión al 2030.
La misión institucional, la visión al 2030 y la visión al 2020 constituyen los elementos orientadores para los objetivos, estrategias, acciones y metas de nidos para este primer periodo rectoral y son estos a su vez los que orientan la planeación operativa anual, a través de los planes anuales de labores (Pal) y/o de sus programas operativos anuales (Poa) ( figura 27).
Figura 27. Esquema para la instrumentación y seguimiento del pedi 2017-2020.
A través de ejercicios participativos, del Programa Anual de Labores (Pal) y/o del programa operativo anual (Poa) se debe asegurar la congruencia entre los objetivos, estrategias, acciones y metas en cada uno de los niveles de planeación. Esto signi ca que el cumplimiento de las metas de cada año debe ser consistente para alcanzar los compromisos del periodo rectoral, lo cual tributa a la concreción del plan prospectivo.
Al construirse la matriz de indicadores de resultados (Mir) en cada uno de los Pal/Poa, se tendrá como referencia los objetivos del plan rectoral y del plan prospectivo. Asimismo, para veri car el grado de cumplimiento y desempeño institucional se consolidará la metodología para el sistema universitario de control, seguimiento y evaluación, misma que ha sido ajustada a las características y requerimientos institucionales a partir de la Parrilla OVAR de Michael Fiol (2006).
Se recomienda una revisión y seguimiento trimestral de avance en los resultados a través de dicho sistema y una evaluación integral anual del desempeño institucional como antecedente y soporte previo a cada uno de los ciclos de planeación, programación y presupuestación para asegurarse de que la asignación de los recursos ordinarios y extraordinarios responden a los planteamientos de la planeación de mediano y largo plazo, en su caso realizar los ajustes y adecuaciones necesarios de acuerdo con el contexto de desarrollo vigente, estas actividades serán responsabilidad del equipo directivo en coordinación con el área encargada de la planeación y evaluación institucional.